Ni los más calificados escritores, historiadores, geógrafos, arqueólogos, astrónomos, teólogos y exegetas del mundo, hubieran logrado realizar una reconstrucción y descripción de la vida de la SantÃsima Virgen MarÃa más impactante, detallada y perfecta que la presentada por la extraordinaria vidente Ana Catalina Emmerick, por medio de sus mÃsticas visiones.
Ana Catalina, fue una humilde monja alemana, estigmatizada, de la orden agustina que vivió en siglo XVIII. El Papa Juan Pablo II la beatificó en el 2004. Según ella, fue predestinada por Dios para ser dotada de dones sobrenaturales tan particulares como nadie los ha tenido hasta ahora (salvo la Virgen MarÃa). La recopilación de sus visiones sobre sucesos ocultos de la vida de Jesús, la Virgen MarÃa, los Apóstoles, la iglesia naciente, profetas y santos del Antiguo y Nuevo Testamento; al igual que pormenores de las historias sagradas sobre los primeros libros de la Biblia, estuvieron a cargo del reconocidopoeta alemán Clemente Brentano, quien las reunió en varios tomos para el provecho de las almas y defensa de la fe católica, ante las graves persecuciones de la que era objeto en ese tiempo en Alemania por parte de los enemigos de la religión; e igualmente, previendo la gran apostasÃa que se avecinaba llegar en los albores del modernismo y de la época contemporánea.
Tan pronto Brentano culminó su obra, fue de admirable recibo por parte de los cÃrculos intelectuales y eruditos de su época ( incluyendo al gran Johann Wolfgang von Goethe) quienes quedaron impactados ante tal desborde de conocimientos culturales, religiosos, geográficos, demográficos, etc., por parte de una religiosa que nunca salió de su pueblo.
En su extensa obra, la vidente relata sobre el paraÃso, el purgatorio y el infierno con más exactitud que Dante en su Divina Comedia; nos narra la caÃda de Adán y Eva con más erudición que Milton en El ParaÃso Perdido; nos descubre las artimañas del demonio con más sentido que Goethe en Fausto; nos muestra la vileza del corazón humano con más realidad que VÃctor Hugo en Los Miserables; nos presenta un análisis del alma más atormentador que en las obras de Fiodor Dostoievski; en fin, nos deleita con más dulzura y emoción que los mejores poemas pastoriles y novelas idÃlicas de la literatura universal.
Supera en extensión y profundidad a las revelaciones de la Magna Santa Hildegarda Von Bingen, Santa Matilde, Santa Gertrudis, Teresa Neumann y otras videntes y estigmatizadas de nuestros tiempos. Confirma y complementa lo que han dicho los santos y doctores de la realidad sobrenatural al sumergirse en la contemplación de esta dimensión más allá de lo posible para la mente humana.