Alba y Alicia eran mejores amigas.
19 años. Rubias. Sexys.
Un peligro en el bar de carretera.
Y para colmo, las nuevas camareras.
Todos los clientes las deseaban.
Y no tardaron en ser reclamadas.
Amparadas. Protegidas. Custodiadas.
Por Luciferial. La banda de motores.
Y aún así... todos las deseaban.
Todos deseaban probarlas...
Y ellas, no aceptaban a ninguno.
Pero ambas deseaban al mismo hombre.
Lucius. Una montaña de músculo.
Tatuado. Atractivo. Dominante.
Implacable. Letal. Y el líder.
Un hombre peligroso... e indomable.
Pero Lucius lo tenía claro.
Si le querían, él no iba a elegir.
Y si le querían, iban a tener que suplicar.