About the Book
El objetivo de este libro es para aquella mama o padre que perdió un hijo, dejarle este mensaje por el momento que he vivido con mi hija en tan poco tiempo que estuvo enferma y falleció en tan temprana edad, tenía apenas 38 años recién comenzando a vivir con su esposo y sus dos niñitos pequeños, con una carrera como enfermera, amaba lo que hacia, era de un corazón noble, les hablo como mamá y como enfermera, ya que soy enfermera y mis tres hijas son enfermeras, me siento orgullosa de ser enfermera y profesora de enfermería. Mi hija fue una persona muy agradecida por todo, daba sin pedir nada a cambio, siempre que podía ayudarte lo hacia. Era una persona especial, porque era cariñosa, respetuosa, responsable con su casa, esposo, como mamá, con su trabajo, como hija, hermana, amiga, sobrina, nieta, y compañera con sus compañeras. Siempre atenta cuando era el cumpleaños de alguien, les hacia un presente con sus propias manos ya que le gustaba las manualidades, pintar, tejer, para navidad elle se adelantaba con meses de anticipación mirando que regalito hacia para todos. Le gustaba cocinar, leer libros o mirar una pelicula ir al cine llevar a sus hijos o sobrino u organizar sus cumpleaños, siempre organizando. Organizar las vacaciones juntas, una salida de finde semana, con los niños, llevarlos de paseo, salir a la ruta en caravana, disfrutabamos de la naturaleza, las montañas, las comidas y regalos regionales. Vaya con todo esto que vivir con mi hija como no voy a seguir extrañándola, si hacia todo con ella, los planes, los sueños, . Nos gustaba los viajes hacia la naturaleza, estar en contacto con la naturaleza, es como encontrar paz, disfrutar entre todos esos espacios y conección
Trabajaba muy duro para cumplir sus metas, sus sueños, llena de vida. Jamás se me paso por la imaginación que perderia mi hija, socialmente te preparan que los hijas sepultan a sus padres, pero no los padres a sus hijos. Ese día que habia que apagar el monitor de su frecuencia cardiaca que estaba en asistolia y luego sepultarla, mi vida se fue con ella, es el sentimiento que tuve por un largo tiempo, nada de mi vida tenía sentido, si no estaba mi hija, mi "gordita" la llamaba. Pero tuve que surguirme de entre las cenizas, porque estan mis vidas mi dos nietos pequeños que me dejo, este con su papá, pero ella estaría muy feliz que acompañe a cuidar de los niños hasta que sean hombres, que estudien, guiarlos, estar acompañandolos como ella hubiese deseado, esa es mi misón hoy. Para poder llegar en esta situación pedi ayuda con una psiquiatra con medicación para la depresión y un psicólogo con terapia por un largo tiempo, la contención de la familia, hijas, amigos, compañeros de trabajo, ocupandome en todo ese tiempo de licencia largo que me tome, para hacer mi tratamiento y hacer cosas en mi casa como pintar, tejer, cocinar, hacer ejercicios, apoyarme más en los espiritual, todas las herramientas que tenia a mi disposición los utilice y siempre pensando en mi empoderamiento personal, y pensando en que mi hija estaría más contenta si su mamá se está ocupando de sus niños. Todo esto me da tranquilidad. No niego que hay días que me invade la tristeza, pero es un rato, me volvi a marcar nuevos objetivos, metas, compartir con mis nieto
La mejor manera de dejar esta vida es saber que he dejado la huella suficiente para ser recordada por las siguientes generaciones. La vida es una sola, es hoy donde tienes que vivir intensamente, sin importar lo que piensen o digan los demás, luego de una experiencia dolorosa, te tienes a ti mismo, por lo tanto debes seguir tus pasiones, tus sueños y la vida te premiará, porque la felicidad esta en lo que hagas en ti mismo cada dia, y si lo compartes con tus seres amados eso es mucho más satisfactorio ya que esos son las imagenes y recuerdos que nos quedan cuando ya no estan en nuestras vidas, y tal vez te permitas encontrar paz y tranquilida en tu corazón mi