About the Book
Muchas veces no encontramos la solución a un problema, por ejemplo, el cinegético, porque no adoptamos una perspectiva lo bastante distante, o lo suficientemente creativa, lateral o divergente para resolverlo. Probablemente muchos no estén preparados, dotados, o dispuestos, para abordar el enorme reto intelectual que significa el pensamiento lateral. Posiblemente los palos del "sombrajo mental" de cada uno sean bastante más confortables: seguir pensando "lo mismo", reunirse, y hablar y hablar, para que todo siga igual... ¿Estamos tal vez rotando como peonzas, en torno a un mismo punto? ¿No deberían existir para la caza otras propuestas, alternativas al más bien retrógrado y siempre cómodo "seguir igual", cuando ya es indudable que "la cosa" va mal? ¿No serán estas posturas acomodaticias el mayor riesgo que la caza racional padece en nuestros días? En este manual hablaremos sobre todo de caza y sostenibilidad; pero tal vez deberíamos hablar más bien de la conciliación entre la Naturaleza y el Hombre, del hermanamiento entre cada cazador y su coto, de la contribución de la caza a la Conservación de la Naturaleza y al bienestar de todos, cazadores o no. En este sentido la caza se enmarca en el Objetivo para el Desarrollo Sostenible "Vida en ecosistemas terrestres" (ODS 15 de la Agenda 2030 de la ONU); pero sus benéficos efectos se extienden a otros ODS distintos (y al revés), después de todo la conciliación entre la Naturaleza y el Hombre se desenvuelve en una compleja trama multidimensional (social, ecológica y económica). En esta novedosa materia, nada es sencillo ni fácil de comprender. Son muchos los avances conceptuales habidos en materia de caza sostenible, hasta el extremo de que esta es hoy una cuestión ineludible ¿Quién defendería una caza insostenible? En realidad, no hay otro argumento ni camino válido para divulgarla socialmente y para defenderla de sus numerosos y enconados detractores actuales y, sobre todo, para mejorarla eficazmente en campo; pero, paradójicamente, se ha progresado muy poco desde los mencionados avances conceptuales hacia la puesta en obra de la sostenibilidad: ir del saber al hacer. Los avances conceptuales habidos, indudables pero más bien dialécticos, no se han convertido en prácticas de campo efectivas. Entre las causas de este retraso destacan las deficiencias tecnológicas: no saber cómo lograr una caza genuinamente sostenible; para conseguir pasar desde el burdo trampantojo actual de la sostenibilidad puramente pregonada, a la sostenibilidad real, cuantificada y aplicada: a los hechos prácticos. Para progresar en este sentido, es preciso investigar científica y técnicamente hasta establecer, proponer y aplicar, un nuevo modelo general para el manejo cinegético que, obviamente, deberá ser divergente respecto a los actuales, manidos y caducos paradigmas, cuyos resultados prácticos son como mínimo cuestionables. Se trata de avanzar desde el agrio debate "caza sí caza no", hasta los pacíficos acuerdos conciliadores. Hablamos de reflexionar, dialogar y discernir hasta alcanzar, desde unos nuevos conceptos, valores, técnicas y procedimientos, un nuevo paradigma para la sostenibilidad cinegética, un nuevo modelo general: el que aquí propondremos y desarrollaremos. Sin proponer, acordar y aplicar un nuevo modelo general de manejo cinegético común para todos los "cotos de caza", términos tan manidos y usuales, y tantas veces tan vaciados de su verdadero contenido, como conservación, ordenación, gestión, territorio, sostenibilidad, desarrollo sostenible, impacto, holismo, integración, custodia, calidad, certificación, ecoetiqueta..., reducidos a una mera y monótona dialéctica, carecerán (carecen) de contenidos cuantitativos reales: de "números".No basta con lamentarse de la mala prensa que la caza tiene. La comunidad cazadora debe actuar, actualizando y divulgando adecuadamente su nuevo parad