INTRODUCCIÓN
La inflamación es fundamental para proteger nuestro cuerpo. Gracias a él, puede combatir infecciones e incluso enfermedades tan graves como el cáncer. Desafortunadamente, la inflamación no siempre es buena para nosotros; puede causar daños graves, por ejemplo, enfermedades autoinmunes. En tales situaciones, la inhibición de la inflamación es muy recomendable, ya que protege al cuerpo contra la autoaniquilación.
¿Cómo deshacerse de la inflamación?
¿Existe una dieta antiinflamatoria eficaz?
¿Qué es la inflamación?
La inflamación es un proceso que ocurre cuando el sistema inmunológico responde al daño celular o tisular. Su propósito es proteger el cuerpo contra amenazas. Cuando ocurre un ataque, se producen rápidamente sustancias proinflamatorias, incluidos leucotrienos, prostaglandinas, tromboxanos y quimiotrienos. Como resultado de la inflamación, los vasos sanguíneos se dilatan, lo que aumenta su permeabilidad. A menudo podemos observar que las zonas inflamadas están enrojecidas, también hay hinchazón y también hay un líquido exudativo que contiene grandes cantidades de proteínas. La inflamación aguda generalmente se asocia con un aumento de la temperatura; está perfectamente justificada, eliminando algunos microorganismos patógenos.
En muchos casos, hay menos o más dolor que se detiene cuando se cura. La respuesta inflamatoria es más beneficiosa si nuestro cuerpo está realmente amenazado. Desafortunadamente, a menudo sucede que el sistema inmunológico reconoce las células de nuestro propio cuerpo como intrusas y decide destruirlas.
Podemos hablar de tal situación en el caso de enfermedades autoinmunes. El sistema inmunológico engañado causa una inflamación crónica que conduce a un daño irreversible a los tejidos y órganos a largo plazo. La medicina moderna es incapaz de explicar por qué nuestros cuerpos desarrollan autoagresión. Sin embargo, vale la pena darse cuenta de que existen formas efectivas de combatir la inflamación crónica peligrosa (puede durar meses o incluso años). Uno de ellos es la dieta.
¿Cómo lidiar con la inflamación crónica? La inflamación crónica no es buena para nosotros. Es solo una señal de que el cuerpo ya no tiene el control de la situación. Una forma extrema de inflamación que ya no está bajo control es la sepsis, que provoca la muerte de hasta el 20 por ciento de los enfermos. Hoy nos enfrentamos a una verdadera epidemia de enfermedades autoinmunes. Lo más probable es que sean el resultado de cómo reacciona el cuerpo humano a los cambios instantáneos que tienen lugar en el entorno natural. Una gran parte de la sociedad respira aire contaminado, come alimentos altamente procesados, usa cosméticos llenos de químicos innecesarios que afectan negativamente la salud.
Todos estos factores ejercen una gran presión sobre el sistema inmunológico, que reacciona de manera inadecuada a la amenaza. Las sustancias peligrosas también son un problema: sustancias contenidas en suplementos dietéticos, que teóricamente se supone que mejoran la salud. A esto se suma el estrés omnipresente que debilita nuestra inmunidad. Podemos lidiar con la inflamación gracias a los fármacos antiinflamatorios (por ejemplo, el ácido acetilsalicílico).
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