Al iniciar este proyecto no tomé en cuenta la frase "El arte imita a la vida" y con el pasar de estos 4 años se salió de las manos el primer boceto que tenía de este libro, es mi bebé, lo he visto crecer y volverse tan complicado que me vi en la misión de concluirlo de la manera más magistral posible. Y cuando miré atrás, no importó tanto el final pues tenía una impresionante novela repleta de frases que a mí mismo me sorprenden, y creo que pude ver trazarse la línea del antes y después, no solo el libro creció y se volvió más complejo. El punto es que no advertí que la vida tenía mucho que inspirar al arte, pero finalmente, al escribir la última palabra, toda la soberbia y egolatría desapareció de mí, se fueron a la mierda junto con los recuerdos vanos en los que no debí estancarme, parece ser que el libro lo escribí para mí, es un reflejo de lo que ha sido mi vida y lo que la rodea, ya no importó más la fama ni la gloria, y a pesar de la tanta timidez, no puedo ser tan modesto como para ignorar lo que tengo entre manos, una obra maestra, ¿y si el resto del mundo no la viera así? No importó más esa pregunta desde que me di cuenta de que todo lo que muchas veces quise decir afloró sin miedos ni remordimientos con esta obra, es para ti, quien lea esto, no subestimo tu capacidad para comprenderla, para comprenderme y entender que todos y cada uno tenemos algo que decir, un dolor muy en el fondo... La empresa Cónstantin lleva años usurpando y explotando el patrimonio y mano de obra de los grupos sociales más marginados de la nación, el petróleo es la única prioridad de estos viles 5 socios, han matado e incriminado con todas las malas artes y el amparo de la ley que solo prevalece para servirles, hasta que una jugarreta con un nuevo socio les terminó volteando el tablero, incluso después de muerto, el legado de su socio más magnánimo los perseguirá. Con tan sencilla trama, tan trillada podría parecerte, muchos no entenderán en un primer momento cómo pude tardar tanto, simple, quise trascender hasta llegar a un punto en que mi protagonista no podía ser ninguno de los héroes o los villanos, sino quien se entrometiera en fuego cruzado, así es como uno de mis menos pensados personajes se empoderó de un protagonismo y valentía que ni el lápiz o el borrador pudieron revertir, y de pronto, reflejé todos, o al menos la mayoría, de problemas en el mundo en el escenario peruano, y lo supe hacer muy bien. Querido lector, este libro es para ti porque además es un compendio de las respuestas que tal vez nadie te pueda dar; agradezco que conectes conmigo pues, aunque no leas el libro, alcanzaste a terminar de leer esto y con esto basta para que me comprendas. Ven conmigo y descubre de qué hablo.