LA CASA DEL DELFIN VERDE. LA ERA DE ORIÓN El sistema solar ha entrado en una fase crítica; la sociedad de la criatura en trance de ser humana, también. Dicha sociedad está controlada por dos clases que se alimentan unas de otras, es decir, comparten el poder y las riquezas; ellas son los Mentículis y los Monopantos. Todos los recursos del planeta están en sus manos. Controlan a los miembros de la sociedad con un liliputiense ejército de Mirmidones, los que se instalan en el hipotálamo y tienen la potestad de elevar o disminuir los niveles bioquímicos en el cerebro, con el propósito de provocar la obediencia, reduciendo a la población a una biología robótica. En esa sociedad existe un héroe cuyo padre ostenta el grado 33 de la fraternidad masónica; si no fuese por los altos puestos que ha detentado en el poder, su gran influencia y su respetable historia ya habrían acabado con su vida. Su hijo, nuestro héroe, Azzur, es un ser extraordinario, dotado de poderes paranormales que le permiten ciertas dotes que fueron activadas cuando aprendió a conectar los dos hemisferios cerebrales y ha sido entrenado por su padre, en las mañas, maniobras hábiles y sutiles, de los poderes políticos de Washington: el lenguaje, la semántica codificada -solo entendida por unos cuantos-, para sobrevivir a la maquinaria de los Mentículis y Monopantos. La historia comienza en plena selva del Petén, en las pirámides del Jaguar y de la Máscara, en las que se ejecuta una ceremonia maya, donde los Balam dan a conocer sus profecías cuando coincide el primer rayo verde solar con la piedra Talar, determinando, a partir de ese momento, los acontecimientos futuros que ya están sucediendo, Los Monopantos y Mentículis son las creaturas-criaturas que detentan el poder sobre el Manicomio Sideral o planeta tierra, y adoran al dios Demiurgo, creador del Big Bang, al cual se le está acabando el tiempo-espacio de la existencia de su realidad virtual, por lo que tiene urgencia de dialogar con Dios para pactar con Él y poder extender un milenio más su permanencia, de manera de obtener más tiempo-espacio para su Creación. Las señales en Orión indican que Betelgeuse puede estallar muy pronto. La aceleración de la inversión magnética de los polos provoca erupciones solares que son cada vez más violentas y las interpretaciones del núcleo terrestre se traducen en fuertes terremotos, tsunamis, bruscos cambios climáticos y largos apagones que desestabilizan todas las estructuras bursátiles, bancos, centros hospitalarios, la conservación de los alimentos, el agua Como Azzur es el único capacitado para realizar esa operación, los científicos de los Monopantos y los Mentículis ponen mano a la obra: Azzur, debe ser sometido a un estado de catalepsia; su cuerpo ocupará, lo que él llama la plataforma de despegue de la Cámara del Rey en Keops, y junto a él un equipo de científicos dirigirá, en coordinación con el Dalai Dharma, las operaciones entre el recinto piramidal y la antena del radio telescopio de Arecibo, en Puerto Rico. Entonces su alma es transferida al cuerpo de su gato, para con ello "garantizar" su retorno; fatua creencia de los Mentículis y Monopantos para obligarle a regresar una vez concluida la misión El objetivo se ha establecido: el espíritu de Azzur viajará por las diversas residencias del espíritu para contactar y dialogar con Dios con la intención de alcanzar el ansiado propósito del Demiurgo y sus adoradores. Comienza el viaje, en el que Azzur va describiendo en la medida en que transita por los universos causales, el infinito hasta ahora desconocido por la astrofísica y la astronomía moderna, hasta que al fin entra a la "Ciudad del Silencio", donde mora Dios. Azzur siente un éxtasis indescriptible ante la majestuosidad del Universo de Dios. Azzur transmite a Dios el mensaje, aunque el Ser Supremo ya lo sabía. Entonces Azzur elige no retornar a su cuerpo. Dios toma una decisión, la que se encu