La historia del ejército de los Estados Unidos se encuentra en la corriente principal del desarrollo militar occidental moderno. Heredero de las tradiciones europeas, el ejército estadounidense ha tomado prestado y contribuido a esa corriente principal. Moldeado por el entorno del Nuevo Mundo, producto de revoluciones democráticas e industriales, al mismo tiempo ha evolucionado, junto con la nación a la que sirve, de manera única. Para la generación actual de estadounidenses que enfrentan desafíos complejos para su seguridad nacional, el papel que la fuerza y las instituciones militares han jugado en la historia de los Estados Unidos adquiere un interés y una importancia cada vez mayores. Este volumen es una introducción a la historia del ejército de los Estados Unidos. Y de la historia militar estadounidense, de la cual esa historia es una parte integral. Definido de forma estrecha, el término historia militar se usa para denotar conflictos en armas: campañas y batallas. En el siglo XVIII, cuando nació el ejército estadounidense y antes de que la Revolución francesa introdujera el concepto moderno de "nación en armas", tales erupciones en el mundo occidental generalmente implicaban enfrentamientos por parte de soldados de los ejércitos opositores y dejaban a las masas civiles prácticamente sin afectar.. Hasta la última parte de ese siglo, las guerras eran relativamente simples y restringidas en área, fuerzas y objetivos. Las guerras de la Revolución Francesa y de Napoleón se convirtieron en conflictos masivos de naciones enteras en armas. Con la expansión de la revolución industrial, la guerra se hizo más compleja y ejerció una influencia cada vez mayor en la sociedad. Esta nueva era en la guerra coincidió con la evolución de los Estados Unidos como nación independiente. En la primera mitad del siglo XX, los efectos de las guerras a gran escala se hicieron tan generalizados que los sintieron no solo las naciones combatientes sino también en todo el mundo, ahora más compactas. El resultado en esas guerras ya no se midió en términos de la preservación del honor nacional o la conquista del territorio, familiar en la guerra del siglo XVIII, sino en términos de supervivencia nacional. Por lo tanto, a medida que la guerra en los últimos dos siglos se ha ampliado para involucrar a más y más personas y más y más de las energías y recursos de la sociedad para combatirlo, o en los últimos días, para disuadirlo, la definición ha tenido que extenderse para abarcar más actividades.