Por lo general en los equipos de futbol, o de muchos de los deportes que solemos ver, los que juegan son un número determinado, los demás son meramente espectadores.
En el juego de la vida, en el mundo secular es más fácil alcanzar el éxito por la persistencia que por el cambio cada cierto tiempo de los objetivos.

Los creyentes en Jesús contamos con la ayuda del Espíritu Santo, pero eso no significa que no tengamos que poner nuestro granito de arena para echar adelante nuestros proyectos ministeriales.
Como mínimo debemos formarnos para asumir los retos de Dios para cada uno de nosotros.

Hay una película llamada LOS ABUELOS eran 3 amigos de toda la vida, y a uno de ellos se le ocurrió emprender un negocio porque se sintió con vida, ganas y energía, algo que le diera sentido a su tiempo, algo no solo para sentirse útil sino que también le permitiera ayudar a otros, así que se sentó con sus amigos e iniciaron una aventura interesante de investigación para obtener la información necesaria sobre la idea de su emprendimiento, tal vez la más importante en sus vidas. Solo te adelantare algunos detalles.

Te diré que a pesar de las críticas de sus propios hijos y otros de sus familiares tales como:
Estás muy viejo para esto, deberías irte al parque con los otros abuelos a pasar el tiempo, creo que la edad te ha vuelto loco, etcétera, a pesar de todo eso, no dieron marcha atrás así que tomaron las riendas, crearon sus propias ideas, en definitiva, se instalaron, en pensar que nunca es tarde, en pensar en que ellos podían hacerlo, y decidieron no ser meros espectadores en el juego de sus vidas sino hacedores.

Lo que requiere ponerse en marcha entrar en acción, palabra que indica que una persona, está haciendo algo, está actuando (de manera voluntaria o involuntaria, de pensamiento, palabra u obra), lo que normalmente implica movimiento o cambio de estado o situación y afecta o influye en una persona.

Ninguna de las cosas anteriores se activará a menos de que hagas, lo que te corresponde.
Y lo que te corresponde hacer una vez que hayas tomado la decisión, es ponerte en marcha, entrar en acción.
Recuerda lo que nos enseña la Biblia en Santiago 2: Ver 14 - 26. La fe sin obras es muerta. Leer el texto.
Por lo tanto las obras, el resultado de la acción son el vínculo entre tus pensamientos o intenciones y tus resultados. Entre lo espiritual y lo material.
Una simple intención o un pensamiento sin acción es igual que NADA.
De hecho, es aún peor que nada...Porque, si piensas en algo y no entras en acción en hacer la obra, en ponerte en marcha, Te causara una gran frustración al saber que tuviste oportunidades reales que Dios, te dio, que estaban esperándote y que por no hacer nada las perdiste.

Por eso mi consejo es que selles tus pensamientos con acciones, tan pronto como puedas.

Levántate tú que duermes...... Efesios 5:14-17 Leer texto.
No necesitas entrar en acción de manera apresurada e imprudente, solo que no te quedes en el pensamiento o en la intención y que el tiempo transcurrido entre esa intención y esa acción sea el mínimo posible, bien sea porque decidas hacerlo que has pensado o no, pero definir esto lo más rápido que puedas y no dejar obras inconclusas o sin resolver.

Te invito, a unirte a nosotros, en este estudio práctico para obreros pastorales y plantadores de iglesias, a que pongas tu capacidad de aprendizaje, tus talentos y ministerio en manos de Dios, para que te formes como un obrero pastoral plantador de iglesias, y puedas adquirir los conocimientos y la formación necesaria para ser parte del equipo de apoyo en tu iglesia local o emprender tu ministerio allí donde el Señor te llame.