Si no crees en ti mismo, nadie creerá en ti. Cuando somos jóvenes y te hablo de mi caso particular, a veces tenemos una baja autoestima, una confianza pésima y las creencias que tenemos sobre uno mismo son de lo peor.
Al final nos convertimos en adictos de la aprobación y validación de otros. Pero hoy puedo decirte que esas cosas cambian, pero todo empieza con el necesario trabajo en tu interior. ¿Tienes dudas sobre ti mismo? Genial, porque eso significa que eres humano.
Todos, en cualquier momento, dudamos sobre nosotros mismos, sobre nuestras capacidades o si nos merecemos tal cosa. A veces la vida nos derriba y nos quita la fe, la confianza, la voluntad, nos hace creer que no somos capaces de lograrlo. Sin embargo, esos momentos no están allí para derribar ni dejarte tendido en el suelo.
Están allí para hacer de ti una mejor persona. Una vez escuché a un familiar decir; "El hierro no se calienta para hacerlo más débil, se calienta para convertirlo en acero". Y si lo piensas bien, nada es imposible. Es simplemente nuestra mente que nos hace creer que no podemos lograrlo.
Las personas de éxito han aprendido a desarrollar creencias inquebrantables que los empoderan, que los motivan y llenan de energía, creencias que los impulsan hacia lo que quieren. Es por ello que muchas personas, quebradas económicamente, llegan a construir imperios millonarios.
Personas que fueron diagnosticadas con alguna discapacidad o enfermedad grave llegan a vencerla y sobresalir en la vida.
Y así te puedes encontrar con muchos ejemplos de vida. Donde nace el problema es cuando dejas que otras personas con sus críticas y sus juicios definan quién eres y de lo que eres capaz. Y te digo que es un enorme problema porque no puedes controlar cómo piensan los demás y por lo tanto, quién eres, siempre va a estar fuera de tu control.
Si, no puedes controlar lo que piensan los demás, pero sí puedes controlar cómo reaccionas a ello.
Si controlas y decides hacerles caso o no, controlas tus comportamientos y tus emociones, para que puedas tomar totalmente el control de tu vida y de tus creencias.