About the Book
¡Una antología de frases célebres diferente a todas las demás!¿Cómo nos enfrentamos a lo doloroso del amor, a la crítica que nos aflige, a la duda que nos quita el sueño, a la desolación del abandono, a las asechanzas de los aduladores, a la dificultad de dominarnos? He aquí una herramienta intelectual para darle la vuelta a todo aquello que golpea y agobia a nuestro ser, sutil, efectiva y, sobre todo, extremadamente divertida, para ayudar a la gente a sacudir el marasmo del alma y los obstáculos que les impide avanzar.Esta novedosísima compilación de máximas y aforismos, hija de la ya afamada página de Facebook "Frases para ponernos en nuestro lugar", convoca a las mentes más preclaras de todos los tiempos para que, en una especie de debate intelectual, diserten ante nosotros sus opiniones sobre una gran variedad de tópicos, siempre con una dosis de exquisito humorismo que le ayude a quienes conocemos a enfrentar la dura realidad cotidiana; aquí se dan cita deportistas ("yo soy poliateo, no creo en numerosos dioses", Dan Fouts); literatos ("el alcohol es como el amor: el primer beso es mágico, el segundo es íntimo, el tercero es rutina. Luego de eso, desvistes a la mujer y listo", Raymond Chandler); políticos ("los curas votan, Dios no", Giulio Andreotti); filósofos ("los bares son lugares universales, como las iglesias, sacros lugares de reencuentro de la humanidad", Iris Murdoch); poetas ("los cristianos han quemado en la hoguera a otros cristianos, bajo la firme convicción de que todos los apóstoles habrían hecho lo mismo", Lord Byron); comunicólogos ("no puedes volver atrás y cambiar el inicio, pero puedes empezar en donde estás y cambiar el final", C. S. Lewis"); cineastas ("debe elegirse quién habrá de ser el crucificado, la multitud siempre salvará a los Barrabás", Jean Cocteau") y sabios de todas las épocas y geografías ("pongo como hecho que, si todos los hombres supieran lo que unos dicen de los otros a sus espaldas, no habría cuatro amigos en el mundo", Pascal).Ahora tendremos siempre a la mano y en riguroso orden alfabético una serie de temáticas tratadas con profundidad y humor, a las que sabremos encontrarles su lado más jocosamente irreverente ("lo único malo de ser ateo es que no tienes a quien invocar durante un orgasmo", Carroll O'Connor); su aspecto más humorísticamente profundo ("me parece justo que un hombre bese la mano de una mujer la primera vez que la ve. Hay que comenzar por alguna parte", Sacha Guitry); su rostro menos agradable, pero del cual poder reírnos y hacer reír ("si la Divina Comedia se pudiera actualizar, el canto que se alargaría más sería el del Infierno", Pino Caruso); su forma más placentera, pero también más dolorosa ("los hombres y las mujeres se mezclan tan bien como el aceite y el agua. Por eso hay que estar agitándolos continuamente; si no, se separan", Alan Alda) y, en general, su lado más difícil tratado desde el cinismo punzante ("Hay tanta crisis que Santa Claus ya no recibe cartas, sino currículas").En fin, una exquisita panorámica literaria que fluctúa entre la risa, la filosofía, el sarcasmo, el humor reflexivo, la burla irreverente y la "actitud House", que nos brindará elegantes cargas explosivas para ubicar al ufano, al pagado de sí mismo, al derrotado, al deprimido, a través de la mejor herramienta humana con la cual golpear a la realidad: la risa. Como señala el autor: "estás ante una antología que te permitirá ver las cosas desde otra perspectiva, que te acercará al aspecto humorístico de la filosofía de vivir, esa que realmente nos ayuda a abrirnos paso por este valle pedregoso".