Mi Padre siempre decía "Soy un hombre de suerte" y era cierto, cada vez que necesitaba algo, simplemente lo pedía al Universo y de una u otra forma, llegaba. Y es que él creía que cada uno podía forjar su propia suerte. Esta es la historia de mi padre a los dieciocho años, entre un diario inventado y las cartas que escribiera a mi abuelo, rescatadas en el tiempo, en la que se vislumbra cómo aprende a forjar su propio destino.
Es el año 1972 y Tito, con sus dieciocho años, enfrenta su segundo año de Universidad en Iquique, a dos mil kilómetros de casa. El mundo es amplio, dinámico, lleno de oportunidades, mucho más amplio que la administración del campo, las cosechas y la vida pueblerina en Llay Llay. Comienza a despertar una idea que va creciendo lentamente y que las condiciones económicas y políticas hacen que se vea factible, la semilla va germinando, se va transformando en un sueño: salir a recorrer el mundo y forjar su propio destino. Con Jorge, su mejor amigo, deciden partir, con muy poco dinero en los bolsillos, muchos sueños en la cabeza y con una vaga idea del destino final: cruzar América y llegar a Estados Unidos. En ese momento no se dimensionan los efectos de la decisión que toman, pero les marcará por el resto de la vida, forjarán su carácter y el destino de sus vidas. En este relato, entre un diario imaginado por el autor - su hijo - rescatado de las anécdotas de sobremesa y las historias mil veces contadas entre la familia, y las cartas - reales - dirigidas al padre de Tito, se alcanza a ver los sueños y los dilemas de un joven, enfrentado a valerse por sí mismo usando su propio ingenio. Con un poco de orgullo, de nostalgia y alegría por vivir, se alcanza a ver la amistad juvenil, la inocencia, la valentía, el amor por la familia, las ganas de conquistar el mundo y cómo día a día los sueños se van confundiendo con la realidad, en un despertar a la madurez y a la independencia. Vemos una transformación en la que aprende a moldear su vida, sus sueños y su destino. No todo resulta como quisieran. A veces para peor, a veces para mejor, así es la vida. Sin embargo, la experiencia que adquieren no la podrían haber obtenido en la Universidad, las amistades que logra Tito, los lazos de cariño y amistad en tierras desconocidas fueron pilares claves en cada destino que alcanzó. Forjando mi Destino, un viaje en la búsqueda de los sueños, es el relato en primera persona de un joven que con muy poco, descubre un mundo ancho, grande y lleno de sorpresas.