Las situaciones de inseguridad y violencia están a la orden del día en México, en todos los estados, los municipios y las comunidades. Eso contestarían los miembros de las familias si se les preguntara sobre estos dos temas, pero cada una de estas personalidades, está conformada por familias, sea adoptiva, compuesta, de hecho, ensamblada, extensa, monoparental u homoparental, eso es lo de menos. Lo importante es, que cada una de estas familias tiene integrantes llamados personas, lo que significa que por pequeña o grande que sean éstas, las organizaciones, el Estado o el País, siempre su unidad fundamental será la persona; de las que justamente trata este libro.
Las características o particularidades de cada familia, grupo, organización o personalidad, tendrá la singularidad de muchas de las personas que la conforman. Por lo tanto, a lo largo de los capítulos de este libro, se encontrará a cada integrante de la familia: los padres, los abuelos, los tíos, los hermanos, los primos, los padrinos, la pareja, los amigos, los compañeros de trabajo, la escuela y el ¿y... yo? Esto a manera de conclusión y la bibliografía, con las características que puedan llegar a tener, sean virtudes o defectos, mismos que impactarán en cada uno de sus miembros para impulsarlos al triunfo de su vida o para arrastrarlos a la maldad causante de su destrucción.
También te identificarás en algunas de las causas de estos comportamientos y las maneras de cómo las personas que son víctimas de ellos pueden ayudarse así mismas y a quién se puedan acercar para solicitarla.
Las formas de actuar presentadas, son realidades narradas por los propios actores que las vivieron o que fueron testigos de estas vivencias. Estas situaciones de vida, permitirán al lector, poder realizar un análisis de las narrativas, incluso una introspección de su propio comportamiento, llegando al final del libro con una conclusión que el leyente podrá enriquecer.
Se trata de reflexionar respecto al comportamiento que debemos de erradicar y los que debemos de emular para mejorar la vida personal, la vida familiar de la comunidad, el Estado y el País.