Se efectúa en este libro, un minucioso recorrido por el complejo mundo de las emociones y se constata cómo, en la vida cotidiana, nos pueden afectar tanto positiva como negativamente. Se pasa luego a analizar el concepto de inteligencia, explorando en primer lugar su concepción tradicional y continuando acto seguido a exponer su vertiente emocional y sus aspectos más significativos. Se sigue con una descripción detallada de lo que es el estrés y su relación con la salud y con diversas enfermedades. Y por último, se analiza la relación de la inteligencia emocional con el estrés y qué puede ofrecer la primera para paliar los efectos dañinos del segundo.
La importancia que sobre la vida de toda persona tienen las emociones es indudable. Afectan al pensamiento, a la actitud, influyen en la conducta y determinan muchas veces la felicidad o la infelicidad. Si bien de forma tradicional las emociones han estado minusvaloradas, considerándose de poca trascendencia en comparación con la parte estrictamente racional del individuo, en las últimas décadas su estudio ha experimentado un considerable empuje y se ha multiplicado el interés por las mismas, lo que ha dado lugar a importantes teorías sobre su naturaleza y sus enormes implicaciones en el devenir del ser humano, aceptándose plenamente en la actualidad que las emociones son parte sustancial y necesaria en el desarrollo y a lo largo de la vida de cualquier persona.
El concepto de inteligencia ha estado ligado históricamente al raciocinio, por lo que su medida se ha circunscrito durante muchos años a la valoración de las capacidades lógicas de las personas, a la estimación de su memoria, su aptitud matemática, numérica y perceptiva, terminando siempre con la ejecución de una tarea por parte del individuo que era estudiado, asignándosele posteriormente una determinada puntuación en función del resultado obtenido. Pero había preguntas sin respuesta, personas con una capacidad intelectual altamente desarrollada, excelentes y valorados profesionales que triunfaban en sus trabajos, fracasaban en sus vidas personales, donde parecían no servirles de nada sus probadas aptitudes intelectuales. Ello hacía pensar que en el estudio de la inteligencia algo se había pasado por alto: la inteligencia emocional llenó ese vacío.
El problema del estrés no es nuevo. Los seres humanos conviven habitualmente con él y aunque está demostrado que no es malo en sí mismo, sí que hay un determinado tipo de estrés que tiene unos efectos marcadamente patológicos y es capaz de producir todo un cúmulo de problemas, tanto de índole psíquica como física; problemas que merman sustancialmente nuestra calidad de vida. Y a este tipo de estrés nocivo es al que habitualmente se hace referencia cuando se habla de estrés, el cual es, hoy por hoy, uno de los trastornos más frecuentes y cotidianos. Algo con lo que todos, en algún momento, nos las vamos a tener que ver en menor o mayor medida. Trataremos, por tanto, de establecer, unas rutinas de actuación que nos sirvan para generar las pautas necesarias que, aplicadas en la vida diaria de una manera eficaz, posibiliten la disminución progresiva, hasta la eliminación, de las dañinas consecuencias del estrés, que en la actualidad hace verdaderos estragos en las sociedades modernas.
EL AUTOR:
Manuel Muñoz Heras, madrileño, licenciado en psicología. Cuenta con una versátil trayectoria literaria en la que ha recorrido ámbitos muy diversos. Es autor de varias obras encuadradas dentro del campo de la Psicología y de heterogénea temática (Relajación, Hipnosis, Mundo de los Sueños, Inteligencia Emocional, Estrés y Pensamiento Positivo) y de algunas monografías sobre diversas y variadas materias (Guerra Civil Española, Historia de España y Mundial en el siglo XX, Licantropía, Lobos y Humor en las redes).