En algún momento de su historia, los hombres se toparon con la necesidad de una guía, una especie de faro que les iluminara su vida, sus esperanzas. Cuando apareció la aldea, la tribu, los seres humanos necesitaron establecer unas normas de convivencia que les permitieran ir más allá del mero instinto de supervivencia, y les reforzara su sentido de pertenencia al grupo, al clan. Fue entonces cuando los pensamientos morales tuvieron la oportunidad de expresarse en forma de preceptos, ceremonias o ritos. Por lo tanto, se cree que antes de que surgieran las leyes, antes de que se crearan las instituciones, los mitos, las leyendas y los preceptos religiosos, surgieron como una primera forma de ordenar los principios de comportamiento de los hombresDesde los primeros tiempos, los mitos han sido relatos compuestos por acciones simbólicas que se transmitieron de generación en generación y que sirvieron para ofrecer respuestas acerca del origen del universo y del hombre, relacionándolos con dioses o con mensajeros que actuaban en nombre de éstos. Los mitos ofrecieron a las distintas culturas antiguas, una visión integradora del mundo, al facilitar la percepción de los fenómenos que le parecían extraños, en una creencia colectiva que le proporcionaron cierta seguridad psicológica a sus seguidores, y le sirvieron de soporte en la construcción de una identidad única de la vida en comunidad. Aquí presentamos una nueva y revolucionaria mitología que explica la formación del Universo, la creación del hombre y el por qué de la maldad humana. Sólo nosotros, como buenos fanáticos de lo que creemos, y al igual que hacen todos los seguidores de todas las corrientes religiosas del presente y del pasado, consideramos, y creemos firmemente, que somos los únicos dueños absolutos de la verdad verdadera. Sólo nosotros podemos explicar lo que verdaderamente ocurrió en la creación y formación del Universo y en la aparición del hombre sobre la Tierra. Ni Creacionismo, ni Evolucionismo, ni Cientificismo, ni nada parecido. Esos no son otra cosa sino malos inventos para embaucar a la gente inocente. Sólo nuestra Cosmogonía Antropogónica es la que puede ayudar a nuestro estimado lector a comprender sus orígenes y entender sus propias capacidades y características. Solamente nuestras teorías son las que pueden responder a la gran pregunta capital: ¿Tiene el ser humano la culpa de su propia maldad? También, y eso es la parte más importante de nuestro trabajo: quizás pueda ayudar a cualquier persona que tenga problemas para conciliar el sueño. Lo que sigue a continuación, constituye una "ligera lectura" que puede servirle de mucha utilidad a todas aquellas personas que sufran de insomnio. ¿Desea dormir como un lirón? Pues, tome nuestro libro y proceda a leerlo con suma atención. En pocos minutos, es probable que esté durmiendo profundamente. Si a los 10 minutos de comenzar a leer, no ha logrado dormirse, entonces le recomendamos que visite a su médico de confianza para que le recomiende un somnífero más eficiente.