La dieta paleo o también conocida como la dieta de la Edad de Piedra plantea la vuelta atrás de las costumbres alimenticias del hombre en la tierra.
En aquel entonces el hombre no conocía la agricultura, era sedentario y se alimentaba salvajemente de lo que conseguía, productos como las frutas, verduras, semillas, carnes rojas, pescados y mariscos.
La paleodieta es sumamente sencilla de realizar. Haciendo que el bajar de peso deje de ser una tortura para quienes toman esa importante decisión. Se acabó la pasadera de hambre, atrás debe quedar eso de andar contando calorías, pesando proteínas. En este mundo tan acelerado en el que se vive hoy en día, todo eso parece una locura, quién tiene tiempo para eso.
He ahí en donde radica el éxito de la dieta paleo, es muy simple de realizar, cualquiera puede cocinar sus prácticas recetas. Todo lo que se consume son productos naturales, lejos de todos esos alimentos que contienen químicos en exceso y que tanto perjudican la salud.
La dieta paleo se ha venido modificando con el tiempo pero los fundamentos planteados por su creador en Dr. Loren Cordain siguen siendo los mismos. Todo en esta vida fluye y se transforma y la dieta paleo también lo ha hecho.
Este régimen alimenticio promete grandes beneficios para la salud, mejorar la digestión, elevar el bienestar y la calidad de vida y lo más importante prevenir enfermedades graves, crónicas. Realmente es un recurso muy valioso que puede llegar a cambiar de forma considerable la vida de una persona.
El Dr. Cordain plantea que esta es una dieta hecha por la misma naturaleza, por lo que su fundamento es más que bueno. Su clave está en realizar una planeación adecuada, pues caer en excesos siempre es malo, el consumo de muchas proteínas sin frutas, sin la cantidad prudente de verduras y semillas puede crear un desbalance nutricional que afecte la salud.