Cuentos nuevos (1894) de Emilia Pardo Bazán aparecían por vez primera en libro, aunque se hubiesen dado a conocer antes en publicaciones periodísticas.
El asunto predominante en estos cuentos es el amoroso: historias de amor, Agravante, La hierba milagrosa, Evocación, La paloma negra, Sedano, Madre, y algunas otras, como La flor seca y El voto.
También aparecen, aunque tímidamente y sin demasiada profundidad, ciertos temas de actualidad: las teorías malthusianas (Sobremesa), la emigración (El voto), la cuestión social (Cuatro socialistas).
Hay unos pocos cuentos que manifiestan en sus asuntos o motivos una cierta dimensión metaliteraria: así, La cruz roja, lúcida reflexión sobre el poder de la capacidad fabuladora, sobre los límites entre la realidad y la ficción.
La mariposa de pedrería es una alegoría sobre la inspiración y la fantasía poética, sus condiciones y límites.
La calavera, es una fantasía sobre una obsesión que tiene algo -o mucho- de literaria.
El ruido, cuyo protagonista es un escritor en busca del inalcanzable ambiente de sosiego para su creación; el texto refleja de manera muy certera esa búsqueda de un nuevo lenguaje poético que acucia a la literatura finisecular.