¿Qué te apetece comer después de un día agotador en el trabajo? Cuando te sientes deprimido, ¿tienes ganas de algo específico?
Bueno, puede que se te antoje un tazón de macarrones con queso, una rebanada de pizza caliente, pollo frito, o incluso una cazuela. Siempre que comes estos alimentos, es casi como si estuvieras dando a tu cuerpo un muy necesitado abrazo reconfortante, cálido y cariñoso. Los alimentos reconfortantes a menudo desencadenan recuerdos y sentimientos de cariño que provocan alegría y consuelo, como su nombre indica. Por lo tanto, no es de extrañar que se nos antoje este tipo de alimentos, especialmente cuando nos sentimos deprimidos o tristes. Estos alimentos suelen ser salados o dulces y rara vez son agrios o amargos. La mayoría de los alimentos reconfortantes se asocian con la cocina casera simple y rústica y los recuerdos de la infancia. Los alimentos reconfortantes no son comidas elegantes y elaboradas, sino una cocina conmovedora que despierta cierta positividad.
La dieta cetogénica, ceto o keto es una dieta alta en grasas y baja en carbohidratos. Uno de los principales principios de esta dieta es asegurar que entre el 70 y el 75% de la ingesta diaria de calorías provenga de grasas dietéticas saludables, alrededor del 20% de proteínas, y el resto de carbohidratos. Si te tomas un momento y piensas en todos los alimentos que consideras reconfortantes, te darás cuenta de que son altos en azúcares y carbohidratos. La dieta ceto no es extremadamente restrictiva, pero pone ciertos límites a la ingesta de carbohidratos y azúcares. Después de todo, los carbohidratos son los principales culpables.
Mientras sigas la dieta cetogénica, probablemente pienses que no puedes volver a comer alimentos reconfortantes porque son ricos en carbohidratos. Bueno, aquí es donde te equivocas. La dieta cetogénica puede parecer superficialmente restrictiva, pero no lo es. Todo se trata de ser creativo y experimentar. Cada uno de los ingredientes ricos en carbohidratos puede ser reemplazado eficientemente con otros ingredientes amigables con la cetogenia. Por ejemplo, reemplazar la harina procesada normal con harina de nueces o semillas. Dado que es una dieta alta en grasas, los alimentos naturalmente grasos como los lácteos, el queso, los pescados y carnes grasos, las nueces y las semillas son parte de ella. Esta dieta es restrictiva sólo si crees que es restrictiva. Todo lo que necesitas hacer es ser creativo. Bueno, aquí es donde este libro entra en escena. Ya no tienes que buscar alternativas ceto amigables a los alimentos comunes ricos en carbohidratos y azúcar.
En este libro, encontrarás varias recetas para cocinar tus comidas favoritas. Desde simples y sabrosos macarrones con queso hasta pizzas, guisos, pollo frito y postres, este libro incluye varias recetas que disfrutarás. Independientemente de que prefieras alimentos dulces o salados, hay algo en este libro que saciará tus antojos de comida reconfortante. ¿Qué más? Todas las recetas son ceto amigables. Por lo tanto, no tienes que hacer compromisos en lo que refiere a tus comidas reconfortantes sólo porque sigas la dieta cetogénica.
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