SINOPSIS OFICIAL

Tras verse atrapados en un hotel de Edimburgo, Marc y Bruno comienzan a sentir la presión del Priorato de Sión cada vez más cerca.

Son conscientes de que han cometido el error que Álvaro, insistentemente, les pedía que evitaran a toda costa. Encerrados en una habitación, sin un plan de huida que poner en práctica, y sabiendo que pronto serán localizados de no hacer nada, las dudas atormentaban cada vez con más fuerza a los dos investigadores y al joven Charles.

¿Valía la pena perder la vida por intentar sacar a la luz un secreto oculto durante dos mil años? El tiempo se acababa y había que actuar rápido.

De pronto, uno de los teléfonos comenzó a sonar... ¿Sería el final? ¿O tal vez, un nuevo principio?

PRÓLOGO DARÍO FERNÁNDEZ (DIRETCOR REVISTA PHENOMENA)

Casualidad... Nada es casualidad, aunque, "casualmente", todo lo parezca.

Hace unos veinte años, días más, días menos, me topé con una hipótesis que me enamoró. Yo la llamé La Teoría de la Magdalena, es decir, que Cristo no murió en la cruz, viajó por todo el mundo y que, además, estaba casado con María Magdalena, la mal llamada prostituta de Jerusalén (¿Grave error o manipulación histórica?) y tenían una hija, Sara o Sarah.

Luego, llegó el boom del Código Da Vinci... Y mientras el mundo se sorprendía ante las aventuras del profesor Robert Langdom, yo solo asentía a veces y me indignaba otras. ¿Por qué? Sencillo, la historia de la Magdalena se torcía de acuerdo a la trama del libro.

Y llego el 2018. Codex Magdala llegó para poner claro sobre oscuro. John Wolf, su autor es un genial escritor que recorrió las calles y lugares en busca de "pruebas". Miró, tocó, olió... Por suerte, alguien hacía lo que yo quería. Investigar in situ esos lugares que yo quería recorrer. Pero como dije al principio, nada es fruto de la casualidad.

Al leer Codex Magdala, no puedo más que coincidir con Lorenzo García Gordillo, autor de su prólogo en la primera parte de la saga, de que John ha escrito maravillosamente acerca de lugares, hechos y personajes tan distantes y diferentes como Jaén, Jerusalén, Rennes Le Chateau, los Cátaros, Madrid, etc... Como tanta belleza, que el paseo por estos lugares (y la hermosa historia escrita) que te quedas con ganas de más y quedas con los ojos abiertos diciendo "¿¿Qué ".
John nos cuenta una historia, recorriendo lugares reales, llevándonos de la mano por éstos, y los recorremos con placer, devorando cada página. Terminar Codex Magdala fue para mí, como dije, quedarme con ganas de más.

Y, por suerte, hay más. Saber de la existencia de esta segunda parte de Codex Magdala fue un placer. Saber que hay más, que la historia continua, fue un placer. Y, además, John me dio el honor de escribir estas palabras.

Codex Magdala II, Revelación, es un libro entretenido, ideal para los amantes de la historia y los misterios por igual. El viaje comienza en Jerusalén, en el año 33 D.C., con una escena que te pondrá la piel de gallina... Y el resto, a leerlo.
Pero les adelanto que la acción trepidante, casi sin dejarte respirar de esta segunda parte, la forma en que todo encaja a la perfección y las afirmaciones históricas que inundan sus páginas, me llevan a decir que, esta vez, John ha superado lo que en Codex Magdala creía insuperable... Esos flashback, que tanto definen a la saga, en ésta segunda parte, te quitarán el sueño...

Disfrútalo, amigo lector. Léelo una y otra vez. Cada lectura descubrirá una nueva capa, una nueva pista, un nuevo "¡Ah...! ¡Mira esto!" Y eso es lo bueno de los libros en general, y de este en particular. Descubres lugares, hechos, misterios...
Sé que al f