Amores burros y otros amores. Pedro López Ganvini, se graduó de periodista en la Universidad Inca Garcilaso de la Vega. Ha publicado cuatro libros de poesía: Concierto de romance, Paralelo 69, Desórdenes, Memorias de un a rata, y ahora publica, Amores burros y otros. Como sus otros libros, este penetra más que en los misterios del sexo, en los "misterios" del sexo social: no el romanticismo de las parejas que se aman sino la práctica de una sexualidad culpable, aquella que los gerentes que violan (tienen una mujer en casa y en la oficina) a sus propias secretarias. Este poeta que transita en las calles de Lima no entiende la cultura como el producto de una élite sino como denuncia de las atrocidades que ocurren en la vida social del Perú. En alguna parte de su presente poemario dirá que no le interesan los libros de las grandes editoriales sino solo aquellos que encuentra arrojados en los pisos de la avenida Grau. A su modo, como es Leoncio Bueno, por ejemplo, es el poeta del pueblo que protesta por tantas injusticias -y se trata de un sistema introyectado en el individuo- es la de la violación de las secretarias: Esbelta con los muslos entreabiertos y semi descubiertos/ por un separador de texto Que acompaña el resaltador de texto que hace sobresalir sus volcanes Que piden mayor revisión Te dibujo con la pluma y corrijo tus errores y los afino y lo pongo a punto a punto de sal y azúcar donde el trabajo de oficina sirve para que el gerente, o cualquier funcionario, viole las reglas de la sana convivencia por las de "amor burro", que es cuando el poder -ese que ejerce el sistema introyectado en el individuo- seduce a la secretaria. En realidad, lo que hace Pedro López Ganvini es escandalizar a la sociedad peruana con tantas violaciones que se cometen en unas oficinas donde lo que debe primar es el buen orden y la elegancia. Sin embargo, el poeta está denunciando estos atropellos no ya a la moral sino a la feliz relación que debe existir entre las parejas y que no existe precisamente porque la legislación del "acoso sexual" es callada con un despido de las planillas o con una alteración de los hechos que ocurren entre las cuatro paredes de una oficina donde la secretaria es acusada de abusar del gerente. Si esto es así en Lima no queda otra cosa que realizar una razzia entre quienes tienen doble moral. Una doble moral que es la característica peruana que ya tantos libros han denunciado y a la que se agrega este libro de Pedro López Ganvini; un libro para que las secretarias no caigan en manos de gerentes inescrupulosos. Enrique Verástegui.A modo de alfalfa para el asno (A modo de justificación para las burradas). Existen amores incontrolables, amores desmedidos, amores absurdos, amores ingenuos, amores insensatos, amores torpes o toscos, intrascendentes, extraviados, estúpidos, irracionales, oscuros, tirados de los cabellos, obstinados, trastornados, turbadores: en conclusión, se podría pensar y decir que solo podría ser el amor de un burro o de burros. ¿Son los más intensos y desquiciadores? Tienen más de sexo y pasión ¿desenfrenada? Considerando los tipos de amor como lo describió Erich Fromm en El arte de amar, ¿suele haber seres que mezclan y generan nuevos tipos de amores? ¿Perder el amor propio, el control hasta babear? ¿Y entregarlo todo por un "amor"? Hay También esos amores desenfrenados, apasionados y de esos amores platónicos y fetichistas que obnubilan la razón y que los hace actuar como cuadrúpedos como asnos rayados, más cuando la yegua sabe lo que quiere y sabe lo que tiene entre piernas. De manera que creo que entre nosotros los humanos, transitan invisibles grandes manadas de asnos, que ofuscados y emperrados no miran más allá de las deliciosas formas y pieles del inefable e incomparable placer. Y, hay miles de funcionarios de turno que disfrazan apetitos "burros" nacidos del poder (...) El Autor.